ANÁLISIS DE TABLAS POBLACIONALES

Se puede observar que en la mayoría de las bases piramidales la población con mayor incidencia es la de niños y bebés de 0-5 años, es decir que en décadas anteriores, la población menor a los 10 años es la que se encuentra con los porcentajes más altos de habitantes, es una población joven, sin embargo, en el año 2015 la población de adolescentes y preadolescentes predomina. En el año 2000, se puede apreciar que la población se encuentra más equilibrada, ya que son muy similares los porcentajes entre niños, adolescentes, incluso en las primeras etapas de la edad adulta.

Podemos decir que el índice de población infantil es decreciente conforme han pasado los años, puede ser debido a que en la actualidad, el índice de natalidad ha disminuido considerablemente. Antes las familias eran numerosas con bastantes hijos  (entre 5 y 12 hijos), lo que provocaba que la población infantil fuera cuantiosa. Conforme han evolucionado las sociedades, las familias se han vuelto conscientes del control de natalidad y el número de hijos es en la mayoría de los casos menos de la mitad de lo que antes era. De la misma manera, toda esa población infantil se ha convertido en adulta y considerando que cada vez hay una cantidad menor de niños, se concentra en este rango de edad, es decir, la población adulta se mantiene constante, mientras que la infantil disminuye. Por otro lado, se puede hacer una relación con el estilo de vida actual, la población adulta se concentra en actividades laborales, la superación profesional y la obtención de una mejor posición económica dando como resultado una tendencia a que muchos adultos elijan no tener hijos.

Las tablas con índices poblacionales son de gran ayuda para diseñar estrategias de publicidad y marketing, debido a que dan una idea a los especialistas de qué sector de la población es conveniente dirigir sus productos, asimismo, qué edades son las que tienen mayor incidencia y poder innovar productos dirigidos específicamente a esa porción de la población.

Si tuviera que elegir un sector de la población para lanzar un producto nuevo, podría concluir que la población actual y proyectada se conforma por personas adultas en edad madura; el índice de longevidad ha crecido, por lo que la edad adulta predomina en las posiciones actuales y las proyecciones futuras de la población, por lo tanto, los productos diseñados para este tipo de sector serían los de mayor impacto a nivel comercial, por ejemplo: la industria de belleza, cosméticos, productos para rejuvenecer, medicamentos, productos que permitan hacer más cómodas las actividades diarias y que ayuden a conservar la salud.

El año 2015 es el que reporta una disminución considerable de la población menor de 20 años. Todavía en el año 2000 se mantuvo constante el número de población joven y la pirámide poblacional se encontraba proporcional, es decir, los sectores de la población estaban distribuidos de manera simétrica, prevaleciendo la población en la edad de niñez.

La proyección del año 2050 manifiesta que la edad promedio de la población será mayor de 60 años, es decir, la calidad de vida se incrementa. Con el paso de los años, es evidente la preservación de la longevidad, es decir, con los avances tecnológicos, los cambios socioculturales, la constante necesidad de obtener un mayor nivel económico ha provocado, como ya mencioné anteriormente, que los índices de población infantil disminuyan y los adultos vivan más años; de la misma manera, podemos resaltar una necesidad de políticas públicas que aseguren el futuro de toda esa población mayor, es decir, políticas que permitan el aprovechamiento de pensiones para garantizar una buena calidad de vida, ya que la mayoría será gente pensionada, requerirán constantemente de servicios de salud, etcétera.

Podemos decir que la proyección en 2025 es de población en edad intermedia y es interesante cómo evoluciona la distribución de edades, por ejemplo, inicialmente los niños predominan, al no incrementar la población infantil, estos se convierten en los adultos que vuelven a ser el centro de la pirámide y por último en la etapa de la tercera edad. Puedo pensar que los niños que existen ahora serán los adultos que representen mayoría en 2025 y de igual manera los adultos mayores que sean mayoría en 2050. Los niños y bebés serán minoría y prevalecerá una población adulta.

Es importante tomar en consideración todos estos factores para entender los nuevos sectores de la sociedad, diseñar e implementar estrategias públicas que puedan satisfacer las necesidades de esta reestructuración social y poblacional. La situación económica será muy diferente, la calidad de vida es mayor y por lo tanto las demandas serán distintas a como fueron en las décadas pasadas. Es preciso también que estemos abiertos al cambio para poder entender el por qué la mayoría de la población cambia, conocer los problemas y áreas de oportunidad en la nueva sociedad que se avecina.